OMBRÉ. Así, sin H.

Paola Egea
Feb 4, 2017
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Primero en el cabello, luego en las uñas, ahora en los labios. El efecto "ombré" o más comúnmente conocido como efecto degradado está súper de moda. Y hay que reconocerlo, uno bien hecho se ve bastante bien, puede dar la ilusión de volumen y darle mucha personalidad y dinamismo a cualquier simple color paliducho.

Pero OJO, mucho ojo.

Un degradado mal hecho puede ser tu ruina. Por ejemplo, has visto a alguna mujer que parece que en lugar de que su cabello vaya de oscuro a claro, es como si tuviera una cortina de pelo negra y otra güera encimadas. (Te dejamos una foto para que entiendas el punto.)

Y discúlpanos si tu eres una de estas pobres víctimas, hay muchísimos excelentes lugares en los que te lo pueden arreglar. Puedes decir que así es como lo querías o que a ti si te gusta como se ve, pero NO. No te engañes. Eso no es efecto ombré, es un dúotono forzado y se ve mal.

Es lo mismo en los labios o en la uñas, o está bien hecho o no. Y hay una sola clave. Un pequeñísimo detalle que es el que puede hacer toooooda la diferencia. No es la gran ciencia, ni el secreto del milenio, y es tan evidente que podría sonar absurdo. Tan lógico que decirlo parece redundante y es tan estúpidamente fácil como que: LOS COLORES ESTÉN BIEN MEZCLADOS. Que la transición sea sutil y natural. Que se vayan combinando entre sí de manera que la división desaparezca y formen parte uno del otro.

Algo así como un amor útopico de esos que salen en las películas. Así de simple, así nada más.

Por su atención, gracias.

Entren aquí a ver nuestro propio experimento con el ombré en los labios y dejen sus comentarios, bueno o malos, al final todo suma ;)